Pablo Moyano, mantuvo bloqueadas por
casi dos horas las plantas de distribución de
Diarios y Revistas de Perfil, La Nación y Clarín. Fue necesaria la intervención del Gobierno,
(los Ministros Randazzo y Tomada que se comunicaron con Hugo Moyano) para que se levantará el
"paro por tiempo indeterminado" con el que Moyano hijo había amenazado. Curiosamente, dicha
"tregua" permitió un brillo aún mayor en la fiesta del club Independiente (con motivo de las obras en su estadio), porque el belicoso grupo partió raudamente desde la distribuidora de diarios hacía el festejo de los
"Diablos" en Avellaneda. “El paro se levantó porque esto pasa al
Ministerio de Trabajo y va a conciliación obligatoria”, explicó
Héctor “Yoyo” Maldonado, hombre de confianza de
Hugo Moyano, "Yoyo", al margen de sus tareas gremiales, es una suerte de representante de los Moyano en el predio de
Independiente en Villa Domínico. Allí los camioneros son gente de peso, al punto que aportaron lo suyo para que se arreglen los vestuarios y la infraestructura del lugar. Lo cierto es que cuando los hombres de
Pablo Moyano llegaron a las plantas ubicadas sobre las
calles Vélez Sarsfield y Zepita, en el barrio de Barracas, lo hicieron en camiones que suelen distribuir
gaseosas y casi de inmediato se produjo un violento incidente con el gerente del centro de distribución de revistas,
Luis Ferreira. Cerca de las
19, sonó el celular de Pablo Moyano. Era papá
Hugo ordenando el regreso del belicoso grupo.
"Listo muchachos, de acá nos vamos todos a la cancha del Rojo", fue entonces la consigna y todos partieron raudamente hacia Avellaneda, para participar de la fiesta de inauguración del nuevo
estadio de Independiente
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