13 sept 2011

POR CULPA DE UN TOMATE

Elsa Serrano: "Pisé un tomate en el COTO y me rompí 4 dientes" . También se quebró el fémur y estuvo 9 meses en recuperación. El relato del accidente. "No me olvido más, fue el 22 de diciembre de 2010 a las 20.44", cuenta a Perfil.com Elsa Serrano angustiada. La diseñadora tuvo un accidente inesperado cuando se encontraba haciendo las compras de fin de año en una sucursal del supermecado Coto de Recoleta: "Pisé un tomate en la explanada, resbalé, me rompí el fémur y cuatro dientes, que se me fueron para atrás por el golpe". A partir de ese momento, Serrano vivió una odisea: "Quedé tirada en el piso, estuve 45 minutos tirada hasta que llegó una ambulancia del SAME". "En la ambulancia ni siquiera tenían un cuello ortopédico. Me tuvo que sostener el médico con sus manos hasta llegar al Hospital Fernández", cuenta indignada. "Después mis médicos me dijeron que me quebré en dos, como si fuera un fiambre, la pierna izquierda. Fue muy traumático, todavía lo recuerdo y me hace mal. Tampoco puedo pasar por el lugar del accidente", agrega. Como era fin de año, Serrano tuvo que pasar Navidad y Año Nuevo internada. "Pero tenía varios vestidos que cortar, y todos saben que yo misma me encargo de todo, así que estuve haciendo cosas en el sanatorio, tenía compromisos que no podía cancelar". Después del susto inicial, comenzó la rehabilitación: "Estuve 4 meses con andador y 4 con bastón. Todavía estoy haciendo rehabilitación, hago ejercicios tres veces por semana. Y recién la semana pasada me terminaron de enhebrar los dientes, no podía comer, fue una cosa tremenda". El reclamo. Ahora recuperada, la diseñadora le exige al supermercado una indemnización por los problemas que el accidente le trajo: "Pero parece que el señor Alfredo Coto no se da por enterado". La modista inició el reclamo con sus abogados y espera tener respuestas pronto: "Gasté mucho dinero, no solamente en médicos, también en movilizarme. Yo perdí una empresa de 6 millones de dólares, pero toda esta historia me dejó psiquicamente destruída". "Esto sucedió a fin de año, cuando hacen esas ofertas de plasmas y va mucha gente a comprar. Pero no ponen la cantidad de gente de limpieza suficiente, entonces pasan estas cosas". Pese al mal trago, Serrano se permite hacer chistes sobre el desgraciado incidente: "No puedo decir que veo un tomate y lloro porque me gustan mucho las ensaladas".

No hay comentarios.: