Cristina Kirchner preferiría que la presidencia provisional, que se especulaba para él, sea para una mujer. Se menciona a María Laura Leguizamón o Beatriz Rojkes de Alperovich. Sabiendo que necesitará de la oposición en algún momento, el kirchnerismo se conformará con una mayoría simple en las comisiones.Aníbal Fernández dejará el Gabinete nacional tras diez años de permanencia interrumpida, pero ese pergamino sólo le valdrá para una participación secundaria en el Senado su próximo destino. Imposibilitado de ser jefe de bloque, cargo que atesora el rionegrino Miguel Pichetto, el quilmeño aceptaría la presidencia de alguna comisión de peso, como Presupuesto o Asuntos Constitucionales, ambas con titulares que dejarán sus bancas el 10 de diciembre (Eric Clacagno y Nicolás Fernández). El kirchnerismo tendrá desde ese día 37 senadores entre propios y aliados, el número justo para tener quórum propio, al que le agregaría la ayuda de Carlos Menem. Con ese peso intentará recuperar la mayoría en todas las comisiones, dominadas por la oposición desde 2009.
Consciente de que no le sobra nada, lejos de aquellos años en que contaba con 45 de 72 votos, Pichetto avisó a los referentes de la oposición que no buscará revancha y se conformará con que los suyas tengan mayoría mínima en cada comisión, esto es 8 de 15 miembros. La UCR y el peronismo federal violaron ese código hace dos años, cuando en algunas comisiones de peso como Acuerdos y Presupuesto repartieron sólo 6 de quince lugares entre el oficialismo. El rol de Aníbal Fernández es motivo de comentarios en los pasillos de la Cámara alta, donde ya nadie especula con su asunción como vicepresidente primero, cargo que se creía para él por tratarse de la segunda autoridad del recinto. Pero, a su vez, el lugar sólo tiene peso administrativo y le interesa a la presidenta, que deberá contar con esa persona para presidir una sesión cuando viaje al exterior. Internamente, sólo otorga algunos nombramientos más que un senador normal, todo demasiado poco para quien viene de una década en lo más alto del poder. Fuentes del Sendo dijeron a LPO que la presidencia provisional será una mujer. Las fichas están puestas en la bonaerense María Laura Leguizamón, amiga personal de Cristina; y la tucumana Beatriz Rojkes de Alperovich. A esta última la perjudica un detalle no menor: su marido y gobernador ya tuvo su premio en la órbita nacional con la continuidad de Juan Manzur como ministro de Salud. La definición llegará después del 30 de noviembre, cuando juren los nuevos senadores y también deban conocerse los otros jefes de bloque. En la UCR, estaría casi confirmado que ese lugar es para el formoseño Luis Naidenoff.
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