La próxima semana el ministro de Trabajo va a impugnar la convocatoria a elecciones. El camionero sigue esperando un llamado de CFK.El Gobierno activa esta semana el plan oficial para destronar a Hugo Moyano de la jefatura de la CGT y el líder camionero se prepara para enfrentar con uñas y dientes a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner ante la Justicia.
El Gobierno hizo saber a miembros del frente antimoyanista que entre el lunes y el martes el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, aprobaría la impugnación presentada por los “gordos” y otros sectores anti-Moyano para que se declare nulo el confederal que convocó a la elección de autoridades de la central obrera para el 12 de julio.
La resolución iba a darse a conocer esta semana, pero se postergó para que el anuncio no coincida con el paro nacional del Sindicato de Camioneros del miércoles. De hecho, los plazos de Trabajo para fallar sobre la impugnación se vencen esta semana.
Pasos. Luego de aprobar la impugnación, la elección convocada por Moyano será declarada ilegal. El camionero, sin embargo, seguirá adelante con su congreso en el estadio de Ferro y apelará la decisión ante la Justicia.
Moyano ya instruyó a sus asesores legales a fin de que tengan lista la estrategia judicial para apelar la decisión del Ministerio de Trabajo, y desde su entorno aseguraron que está dispuesto a dar la batalla en el ámbito legal y “llegar hasta la Corte Suprema si fuera necesario”. En Camioneros, aseguraron a este diario que el diputado Héctor Recalde, histórico asesor legal de Moyano, se comprometió a avanzar con esa estrategia ante el Ministerio y ante la Justicia.
Al mismo tiempo, el hombre que pidió diálogo a la Presienta mientras decenas de miles de camioneros copaban la Plaza de Mayo el miércoles, espera que su pedido sea escuchado. Muy cerca del camionero admitieron que Moyano “espera un llamado de la Presidenta para sentarse a la misma mesa”, aseguró uno de sus más fieles colaboradores a este diario.
Moyano admite que la puja con la mandataria “es personal” para ambos lados.
Táctica. La estrategia planeada por el Gobierno y el frente antimoyanista será lograr que la CGT de Moyano sea declarada ilegal.
Luego de la impugnación del Ministerio, el frente antimoyanista, que confirman los “gordos”, “independientes”, metalúrgicos y ex moyanistas, convocará a una reunión para fijar fecha del nuevo confederal. A partir de entonces, según el estatuto de la CGT, deberán esperar unos sesenta días para reelegir autoridades de la CGT anti-Moyano.
Mientras tanto, Moyano deberá concentrarse en dar su batalla ante la Justicia para apelar la decisión del Ministerio y contrarrestar la declaración de ilegalidad de su reelección.
A partir de julio, el Gobierno prorrogaría los mandatos de las actuales autoridades de la central obrera, donde el frente tiene mayoría. De los 35 miembros del actual consejo directivo, 19 se oponen a Moyano.
Otra opción del Ministerio es nombrar un normalizador de la CGT que esté acompañado por una comisión de dirigentes proporcional a la composición de los miembros del consejo directivo. Es decir, con mayoría antimoyanista. Sin embargo, esa opción es la menos probable.
Los “gordos” ponen todas sus fichas a la prórroga de autoridades. Con Moyano sosteniendo “su propia CGT”, el actual secretario adjunto de la central, Juan Belén (UOM), será entonces la máxima autoridad “legal” para el Gobierno. Belén pertenece al gremio que Antonio Caló, el candidato del oficialismo para suceder a Moyano. “Se establecerán reglas de juego para funcionar así hasta septiembre y se celebrará un nuevo congreso de elección de autoridades”, confió uno de los dirigentes que habló esta semana con Tomada.
“Ilegal”. El escenario será difícil para el camionero, quien está dispuesto a dar pelea y deberá reflotar el perfil rebelde del Movimiento de los Trabajadores Argentinos (MTA) que lideró en los 90, cuando el menemismo ninguneaba a su central.
El Gobierno convocará a la “CGT legal”, que aún no decide si será encabezada por Caló o por un triunvirato compuesto por el metalúrgico, un representante de los “gordos” y otro de Luis Barrionuevo, que exige la conducción tripartita.
¿Quién será convocado como CGT para participar del Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil que debe realizarse en los próximos meses? “La CGT legal”, contesta un miembro del frente antimoyanista.
En el moyanismo, creen que el Gobierno busca generar en la CGT el mismo efecto que provocó ante la elección de la CTA, cuando Pablo Micheli se enfrentó a Hugo Yasky, en una interna por establecer si la central de trabajadores sería afín u opositora al Gobierno.
Ante la indefinición de los resultados electorales, el Ministerio de Trabajo prorrogó el mandato de Yasky, anterior secretario general de la entidad, para desacreditar a Micheli. Al día de hoy, permanecen dos CTA gracias a esa táctica.
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