La escalada de precios se debería a la caída de la producción de trigo en el norte del país, principalmente como consecuencia de la sequía. Los productores afirman que el alza del precio de la harina es consecuencia de la caída de la producción de trigo en el norte del país, principalmente a causa de la sequía y las altas temperaturas de la región. El nuevo incremento se comprueba tanto para el consumo minorista como mayorista. El precio de la harina común ascendió en promedio hasta los $ 6.50 mientras que la leudante se la consigue alrededor de los $ 9 en algunos locales. Los panaderos se quejaron de que en los últimos días la bolsa de 50 kilos ascendió de los $160 a $ 260. La escalada de precios se debería a la caída de la producción de trigo en el norte del país, principalmente como consecuencia de la sequía, lo que provocó una escalada del precio de la harina, tanto para el consumo minorista, como para la elaboración de productos alimenticios. En este sentido, el titular de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), Sebastián Robles Terán, apuntó que la harina que llega a las industrias molineras, y que luego reciben los consumidores en los distintos productos, se elabora con el trigo obtenido en las campañas de 2012 y de principios de este año. Además apuntó que en la campaña del año pasado se alcanzaron rindes bajos, similares a los de hace 100 años. "Hubo una fuerte caída, tanto del volumen de la producción, como del área de siembra. En el país había, en años anteriores, 5,6 millones de hectáreas sembradas con trigo. Ahora hay 3,8 millones de hectáreas", precisó Robles Terán. Asimismo, expresó que esta situación llevó a que, luego de que se cumplieran con los contratos de exportación, los productores del país contaran con un stock ajustado para cubrir la creciente demanda interna. De acuerdo con La Gaceta, el escenario de los productores del norte es especialmente complicado si se suma el impacto negativo de la sequía. "Las primeras cosechas de trigo en el país provienen del norte. Pero en esta área no hay trigo suficiente, entre otras razones, a causa de la sequía. Por lo tanto, los productores tendrán que subsistir con el stock del año pasado hasta que se inicie la nueva campaña, entre septiembre y octubre próximos", remarcó Robles Terán. A raíz de estos incrementos, el presidente la Cámara de Panaderos, Mario Veliz, ratificó que en los últimos días se registraron nuevas subas en el precio de las bolsas de harina y otros productos necesarios para la elaboración de pan y derivados. Por lo que el sector no descartó la posibilidad de un nuevo incremento en el precio del kilo de pan que lo ubicaría alrededor de los $18.50. El titular de la Cámara señaló que los 50 kilogramos de harina llegaron esta semana a entre $ 250 y $ 260, cuando a mediados de mayo, cuando se definió el último incremento en el precio del pan, no superaban los $ 160. En la actualidad, el kilo de pan cuesta entre $ 15 y $ 16, por sugerencia de la Cámara. Al comenzar el 2013, costaba $ 10. Entre enero y febrero, se dieron subas del 20% y del 17%, llevando el precio a $ 14. Y, finalmente, a mediados de mayo el valor volvió a incrementarse en alrededor del 10%.
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