Las casi doce horas de sesión aburrieron al vicepresidente, que buscó entretenerse con su tablet. La maratónica exposición de Jorge Capitanich en el Senado terminó aburriendo a más de uno, al punto que varios senadores coincidieron en la necesidad de cambiar la metodología para el próximo informe de gestión del jefe de Gabinete.
Tal fue el tedio que por momentos se vivió en el recinto, que el vicepresidente Amado Boudou se aburrió y en plena sesión jugó al popular Sudoku con su tablet, según quedó registrado por el fotógrafo Néstor Siera, del diario Clarín. La insólita imagen se dio mientras Capitanich enfrentaba durísimas críticas de la oposición a la gestión del Gobierno nacional. El jefe de ministros estuvo casi doce horas parado en el atril que se hizo poner especialmente para la ocasión y ni siquiera interrumpió para ir al baño, lo que provocó algunos chistes de los senadores.
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