SE PRESENTARON LAS DENUNCIAS DE LAVADO EN MIAMI

Carrió presentó en Miami las denuncias de lavadoLa diputada de la CC, Elisa Carrió, llevó hasta los tribunales de USA, las denuncias de lavado de dinero. "Lo hago en este país también porque sus actividades pueden ser riesgosas", dijo en la presentación (en el Congreso y en la Justicia), donde afirmó que Lázaro Báez tiene al menos "6 empresas" registradas en Florida, entre ellas, la conocida como La Rosadita. La diputada por la Coalición Cívica Elisa Carrió presentó ayer ante la justicia y ante el Congreso de USA documentos e información sobre casos de lavado de dinero que supuestamente involucran a los empresarios allegados al kirchnerismo Lázaro Báez y Cristóbal López. "Lo hago en este país también porque sus actividades pueden ser riesgosas", dijo la legisladora en su presentación, en donde afirmó que Báez tiene al menos "seis empresas" registradas en Florida, entre ellas, la financiera SGI, más conocida como La Rosadita, según el diario 'La Nación'. "La presencia de Báez en Florida nos lleva a hacer la denuncia ante la fiscalía de Miami", explicó la legisladora al matutino. La diputada explicó en sus textos que tanto Báez como López tienen "estrecha relación" con la Presidente y con su fallecido marido, el ex presidente Néstor Kirchner. Otro tanto hizo ante el Senado norteamericano, donde Carrió entregó documentación ante el despacho del demócrata Carl Levin, quien se ha especializado en delitos sobre lavado de dinero. "Estoy convencido de los lazos entre el terrorismo y el lavado de dinero que mueve miles de millones de dólares", suele decir el legislador por Michigan, que se convirtió en un sabueso en la materia. "Por eso lo fui a ver", dijo Carrió. La legisladora trae también entre sus inquietudes la salud de la democracia y de las instituciones en nuestro país, así como las crecientes denuncias por ataques a la libertad de expresión, materia en la que instituciones y autoridades del gobierno norteamericano se han hecho eco ya de las denuncias de sectores no oficiales. La decisión de Carrió de ir a la justicia norteamericana en cuestiones de lavado constituye una escalada en las denuncias que al respecto se vienen haciendo en el país contra sectores cercanos al poder.